SECADORA
Fabricante de plantas de jabón
— SECADORA —
Secadora para planta de secado de jabón sólido
El jabón de saponificación (jabón puro) es líquido y caliente. El porcentaje de agua que contiene ronda el 32% y su temperatura es de unos 90°C.
En la fase final de procesamiento, el jabón de tocador tiene un contenido de agua de alrededor del 13% y una temperatura de 35-40°C. En cambio, en el jabón de lavandería, el porcentaje de agua es mayor, en torno al 20-25%, por lo que debe procesarse a temperaturas más bajas, en torno a 20°C, para mantener intacto el grado de plasticidad.
El secadero es una máquina que consigue los parámetros adecuados, tanto en porcentaje de agua como en temperatura, en un solo proceso, gracias a la evaporación al vacío.
El mecanismo físico del sistema de secado es sencillo: se introduce jabón puro caliente y húmedo en un entorno con menor presión. Para alcanzar el equilibrio, el exceso de agua se evapora.
En detalle, el proceso procede como sigue: el jabón líquido (jabón puro) procedente del proceso de saponificación se envía al atomizador a través de un intercambiador de calor de carcasa y tubos. La finalidad de esta máquina es regular (aumentar) la temperatura del jabón y también preevaporar una cierta cantidad de agua, en caso de que el balance de masa lo requiera.
Las condiciones dentro del atomizador son tales que el jabón libera el exceso de humedad y alcanza la temperatura deseada.
El condensador de contacto directo recibe los vapores del sistema y los condensa con una cantidad de agua fría pulverizada a través de un conjunto de boquillas situado en el cabezal de la unidad.
Esta agua (con el condensado recién formado) experimenta un aumento de temperatura debido a la absorción del calor de condensación de los vapores del sistema. El agua se recircula alrededor del condensador a través de un intercambiador de calor en el que cede este exceso de calor al agua fría producida por una enfriadora, que circula en contracorriente.
Este sistema ofrece un control casi total de la temperatura de condensación, garantizando así los niveles de presión residual requeridos. El exceso de agua de recirculación (el condensado) se elimina mediante un sistema de mantenimiento de nivel en el condensador.
Al separar los dos circuitos (agua contaminada de la planta/agua limpia del enfriador), se evita la contaminación ambiental. El condensado eliminado se recupera en la saponificación. Los no condensables, como las infiltraciones de aire, son eliminados por la bomba de vacío.
Si lo deseas, también podemos suministrar unidades de vacío convencionales con eyectores de vapor y torres de refrigeración.